En 1958 dejó México para instalarse en la República Democrática Alemana, donde realizó varias obras murales y donde falleció en 1982. La relevancia de Josep Renau en la historia del arte del siglo XX y la pertinencia de su obra y su pensamiento en el siglo XXI es quizá tan importante como poco reconocida.
Si bien es cierto que no podemos decir que Renau sea un perfecto desconocido, la realidad es que el alcance que tuvieron sus aportaciones artísticas, teóricas y organizativas fueron mucho mayores de lo que podría parecer a tenor del poco conocimiento que existe sobre estas, no solo entre la población, sino también en la mayoría de los ámbitos políticos e institucionales.